domingo, 3 de diciembre de 2006

Toda agenda es inútil


Este año puedo hacer kung fu, le dijo el alma baja al maestro.
Puedo hacer ejercicios, nadar todas las mañanas, aprender a cantar, escribir poesía, viajar, dibujar, ver cosas interesantes... siguió enumerando.
Ir a festivales de títeres, hacer cursos de clown, ampliar fotografías y exponerlas, montar obras de teatro para niños, dirigir algunas para adultos, filmar un cortometraje, editar un libro, ser guionista de televisión, ganar premios de publicidad, escribir una novela, hacer muebles, probar drogas, se detuvo y dijo con un suspiro: pero nada de eso me llena.

El maestro apenas respondió:
sabrás qué hacer el día que entiendas
que tu tarea no es hallar lo que te llene
sino aquello que te alegre llenar de ti.
El alma baja contestó: esa respuesta es sabia, maestro, pero... no la entiendo.
El maestro y el alma baja se miraron a los ojos, en silencio, largo rato. Hasta el amanecer.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Estoy como el alma baja, la frase del Maestro luce como muy sabia... pero no la entiendo.

Anónimo dijo...

Estoy como el alma baja, la frase del Maestro luce como muy sabia... pero no la entiendo.

Anónimo dijo...

Ahh.. es muy fácil. El alma baja es la representación de los apetitos humanos desatados con fuerza cataclísmica en la incommensurable infinitud de este universo incomprensible, que se haya más allá de todo parámetro y parangón humano y quizás aun por encima del supremo creador y gran gastifitero de todo lo existente en esta dimensión. En cuanto al maestro de kung fu... obviamente le debe plata al chibolo y se está yendo por la tangente.

Pepefina dijo...

y que pasa si al final nada te alegra?

Anónimo dijo...

Pues ponte a matar tiempo en la blogósfera. Es como hacer zapping pero con más canales y menos propaganda.