viernes, 12 de junio de 2009

Ni tú siquiera


Ni cien mujeres ni diez mil suspiros
ni un millón de años
ni una gran tragedia
ni una muerte cruel
ni una mano inmensa
ni dioses ni monstruos
ni el amor de otros
ni el alcohol ni el viento
ni siquiera inefable la locura
tampoco tu desprecio
tus burlas afiladas
ni el odio de las brujas
que te amamantan te raptan te transforman
ni esas ratas negras que infectan tu cama
ni el silencio
las prisiones
el orgullo
ni el sol desintegrado en un millón
de tardes y de esperas
ni el karma o la miseria
ni la traición ni los hijos
ni el tormento

me lo dijo entre sueños un ángel
sonriente
ni las palabras
ni el vacío
ni la muerte.


Este texto mío va, creo, para una obra que estoy escribiendo, Mara Sanz. La foto del ángel de piedra es de Dean Palmer.

4 comentarios:

S. dijo...

Y es que nadie, supongo. Nadie, excepto uno mismo...

Mara Sanz, pareciera nombre de actriz y con talento. Me acordé de la famosa Leonor Manso en su silla bañada en cápsulas de colores. Tremenda actriz!
Cómo es la vida de Mara Sanz?
Suerte con la aventura de crearla!

S.

Anónimo dijo...

Tengo algo de sabiduría maravillosa.

Anónimo dijo...

hola, Chicos, Directo al grano y bien escrito! ¿Por qué no todo el mundo sea así?

Anónimo dijo...

Lo que descubro es difícil encontrar un blog que me puede capturar un momento sin embargo, su blog es diferente. Bravo .