Se acaban mis vacaciones. Me alejé y me acerqué según hizo falta. Abrí caminos, cerré otros. Y ahora cerraré la laptop, porque necesito oír mi voz -mis voces- pidiendo y llorando, alegres y directas. Definir lo que sueño -entre tantos sueños- avanzar más lo ya avanzado y poner mi mente en lo que quiero, atendiendo a la frase que oí en una película que vi con Alicia: a donde va tu mente, todo lo demás lo sigue.
Escribí en Superpopper que el villano, el Zombie Maker, usaba las pantallas para chuparnos el cerebro. Dejaré de mirarlas hasta el proximo fin de semana. Miraré mis manos, mi gente, los sueños que se me pongan delante.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario