viernes, 28 de octubre de 2011

Ser hincha educa.




Ser hincha te enseña a vivir dignamente.
Ser hincha te enseña que el error es imperdonable, pero sucede.
Que la alegría no debe tener límites. Que puedes gritar sin vergüenza y puedes llorar como un niño sin importar quién te ve.
Ser hincha te enseña a ser humano. A abrazarte con desconocidos. A creer en Dios, nuevamente.
Ser hincha saca lo mejor de ti y lo peor de ti. Lo mejor para que lo compartas. Lo peor para que lo elimines y no se repita.
Ser hincha te enseña a odiar con respeto. Y a respetar sin miedo.
Ser hincha es identificarte con otro, estirar la pierna al mismo tiempo, sentir todos los corazones como uno solo.
Ser hincha te enseña a creer en el equipo, sean quienes sean. A ponerte un objetivo. A pensar cómo llegar.
Ser hincha es ser más que tú y menos que tú, y eso solamente lo entiende un hincha.
Sé hincha de algo. De la selección. De la comida peruana. De ti mismo.
Apasiónate y te llenarás de triunfos, de alegrías, de vida.
Ser hincha es mirar al cielo todos los días con una sonrisa. Y salir a trabajar sintiéndote plenamente humano. Con ganas de crecer.




1 comentario:

Anónimo dijo...

soy hincha de tu post

:)